Últimamente los Destellos,
como una sanguijuela, se hinchan de idea y palabra en el barbecho de la espera
y, aunque abortos aún, nacen algo domados.
Estos, desnudos y liberados,
se escapan de la horma y se exhiben en la imperfección de su plenitud
inmediata, aunque algunos vengan a iluminarse en decasílabos.
₪
Estar siempre dejando de ser
para ser el que nunca te espera
₪
En la
posibilidad infinita, deshorizontarnos.
₪
Omniignorancia de lo excesivo e impostado.
₪
Sin
oposiciones, llegó a ser pastor del bigdata
₪
La flecha del deseo se atropella, se adelanta a sí misma.
₪
Hipérbole de presente: futuritis.
₪
Un tópico, cainita, fagocita al otro:
“tempus irreparabile fugit”: “tempus se occidit”
₪
Dos atenciones interactivas: centrarte para poder ignorar
o viceversa.
₪
-“Soy un cadáver del progreso” – dice el poeta.
-“Eres un zombi de silencio” – le responde el viento
₪